La microbiota: el origen invisible de nuestra salud

El próximo 27 de junio, se celebra el día mundial de la microbiota y aprovechando esta fecha, veamos un poco más en profundidad qué es la microbiota y por qué es tan importante?

Pocas personas saben que la mayoría de las enfermedades crónicas y autoinmunes comienzan en el intestino. Allí reside un ecosistema invisible pero poderoso: la microbiota intestinal, una comunidad de billones de microorganismos que influye en prácticamente todos los aspectos de nuestra salud.

Nuestro intestino alberga el 70-80 % de las células inmunitarias, regula la inflamación y participa en la producción de neurotransmisores como la serotonina. Por eso se le conoce como nuestro segundo cerebro. Su equilibrio no solo afecta la digestión, sino también nuestro estado de ánimo, niveles de energía, respuesta al estrés y hasta la claridad mental.

Cuando esta microbiota se desequilibra (lo que conocemos como disbiosis), abre la puerta a la inflamación sistémica, permeabilidad intestinal, alteraciones hormonales y enfermedades que a menudo no asociamos con el intestino, como fatiga crónica, ansiedad, enfermedades autoinmunes, alergias y trastornos metabólicos.

Cuidar nuestra microbiota es cuidar nuestra raíz.

A través de una alimentación funcional, el manejo del estrés, el descanso adecuado y la conciencia de lo que nos nutre en todos los niveles, podemos restaurar este ecosistema vital y, con ello, transformar nuestra salud desde adentro.

Muchas mujeres se alimentan saludablemente, hacen ejercicio y cuidan su estilo de vida, pero siguen sintiéndose inflamadas, con cansancio, ansiedad o problemas digestivos. La razón puede estar en la microbiota intestinal.

Aquí te doy algunas señales de una microbiota desequilibrada:

1. Puedes sentir inflamación constante

2. Problemas digestivos como gases, estreñimiento o diarrea

3. Fatiga crónica

4. Ansiedad o cambios de humor

5. Intolerancias alimentarias

Ahora veamos algunos tips de cómo restaurarla:

1. Elimina alimentos ultraprocesados y azúcares refinados

2. Aumenta el consumo de fibra, frutas, vegetales y fermentados

3. Incorpora probióticos y prebóticos de calidad

4. Gestiona el estrés y duerme bien ( esto es clave, un buen sueño es super importante).

Tu salud intestinal es la base de tu bienestar integral. Escucha a tu cuerpo, dale lo que necesita y comienza a sanar de adentro hacia afuera.

Si necesitas conocer por donde empezar, puedes hacer una cita conmigo para apoyarte en este proceso.

Un abrazo!

Coach Marisela